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Lo que no sabes...

Anti navideño, corazón gélido, cretino...

Anti navideño, corazón gélido, cretino...

Para El Kastor, que hace un año murió, y se le recuerda hondamente y aún vive en mi corazón.

> En los más de tres años que tengo de bloggear, nunca me habían dicho tantas cosas tan indignas como en la semana que recién termina.
En éstos días, comenté aquí -con mi peculiar sentido mordaz e irreverente- porqué no me gusta la Navidad. Anque más de un comentario fue favorecedor, algunos más se enfocaron en el poco sentido humano y sensible de mi persona. "Corazón gélido", me calificó una visitante en mi perfil de FB, desde donde leyó mi pos anti navideño.
"Lo importante es la reflexión", apuntó alguien más, tratando de cubrir el lugar que supuestamente estaba dejando libre al hacer mi alegoría a Ebenezer Scrooge, e invitándome a que ocupe mi mente en cosas más productivas, y no en blasfemar contra el sistema establecido.
Tal vez, todas ellas y ellos lectores novatos de mi blog, pensaron que estaba entrando en terreno picante, al poner en duda tan bonita tradición religiosa.
En mi post de la semana, enfoqué mis baterías a ese mito nada religioso que es Santo Clós. Y daba la referencia de que el Santa Clós rojo, con cara de borrachín, es un personaje creado por Coca Cola, allá por 1930. En aquel entonces Coca Cola solicita al pintor Habdon Sundblom que remodelara la figura de Santa Claus para hacerlo más humano y creíble. Algunos consideran un mito urbano el que la Coca Cola haya creado al personaje para su imagen refresquera de color rojo y blanco. Pero en lo que muchos están de acuerdo, es que esos colores rojo y blanco ayudaron a que la Coca Cola se colocara en el gusto del público, y a identificar la Navidad y su personaje con ésta bebida.

Que ocupe mi mente en la reflexión, no en blasfemar, era el llamado de lectores novatos a mi blog.

Luego, conté en mi publicación, que el jueguito de los regalos era una verdadera tontera. Prácticamente innecesaria. En una época en que los precios suben entre un 8% y un 18% -según especialistas en el tema-, es cuando muchas personas enloquecen por querer regalar algo. Mi postura, es obvio, parte de que tengo la fortuna de contar con mucha gente que me estima, y a lo largo del año me regala muchas cosas materiales e inmateriales. Entiendo que muchas personas, al carecer en sus vidas de un sentido afectivo real, quieren sentirse queridas en éstas fechas y buscan como peces en el agua, el resquicio de tranquilidad ante un mundo rodeado de tiburones (¿sí entendiste mi sentido burlón?).

En un ataque estéril Navideño, puse un arbolito de Navidad artificial... como mi sentido Navideño.

Bueno.
Ya me eximí.
Me liberé.
Limpié mi alma.
El jueves en un ataque eufórico -estéril- navideño, compré un arbolito de navidad -artificial, como mi sentido navideño- y lo puse en mi casa. Es un árbol un poco impotente: le faltan bolas... de esferas. Pero tiene harta luz. ¿Suficiente, no?
Así, espero que vengan comentarios, de menos, más irreverentes.
A final de cuentas, ¿quedó linda mi intención, cierto?
Ahí está la foto.

2 comentarios

Demry -

Hooooola!!!
Ahora debes pasar por mi blog.
Me alegro de que compraras el árbol. Nadie sabe si aprendes algo nuevo con esta experiencia.
Te dejo un abrazote, y te espero por casa,
Un Beso,
Demry

CRUDO -

ñaaa que les haces caso, yo soy un grinch e igual me pueden decir amargoso pero tienes razon en lo que comentas, aun asi quiero que me den cosas jeje, quee??? soy humanooo