La tecnología me alcanza
La tecnología me alcanza.
No dudo en reconocerlo, ni mucho menos me abochorna (a todo esto, ¿hay algo que realmente me abochorne?).
Más que un consumidor empedernido de ésta, soy un espectador pasivo, que disfruta viendo cómo los demás se enrollan en cables, términos, complicadas aplicaciones, falta de compatibilidad entre sus cacharros, etcétera.
Tengo teléfono celular, pero no suelo pedir a gritos aquellos que cuentan con mp3, radio, manos libres, blue tooth, IR, juegos, e mail...
Lap Top hasta hace poco menos de un año me alcancé una, y sí, también lo reconozco, soy muy feliz con ella.
Pero un tema que hasta hace poco había contemplado era el de adquirir un reproductor de mp3, o sea, un iPOD. Desde hace varios años cargo en mi mochila con un reproductor de cd's, disc man.
Hace poco tiempo me encontraba en un Vips, tomando mi café, y me visualicé a mí mismo: sentado, con mi libro a un lado, y el reproductor de cd's al otro... "¡Qué anacrónico me he de ver!" fue lo primero que pensé al "verme" con mi disc man.
Desde entonces, se me metió en la cabeza adquirir un iPOD.
Yo he tenido contacto con ese cacharrito por que mi pareja tiene uno. El diseño, la textura, la pantalla, las funciones que se activan con un leve toque digital, me gusta.
Si yo soy feliz estando conectado muchas horas a la semana a mi disc man escuchando música, pensé, sería más feliz si pudiera almacenar cientos de temas musicales en ese aparatito. Y mejor, verme más fashion
Estamos en marzo y es fecha en que no lo he adquirido. ¿Pretextos? ¡Muchos! No me he hecho de mi iPOD...y sigo cargando con mi disc man.
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diego -