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Lo que no sabes...

70 años de historia...

Descrito como una criatura con tentáculos y "grande, mayor que un oso y brilla como el cuero húmedo", fue la definición de un extraterrestre narrada a través de los micrófonos de una estación de radio, y también era como se difundía la invasión ocurrida siete décadas atrás por marcianos.
"¡Es algo indescriptible!", narró con gritos de pavor, un joven reportero que se encontraba cerca de la nave que, cubierta de llamas, recién se había instalado próxima a la granja de Grover Mill, en Nueva Jersey.
Esos minutos, esa señal y esa información daba credibilidad a todas esas personas que por décadas habían reportado y descrito avistamientos OVNI. Originalmente tachados como locos, y poco tomados en cuenta, los testigos que alrededor del mundo narraban sus encuentro cercanos, estaban teniendo eco en la unión americana.
Fue un 30 de octubre de 1938, cuando a través de la estación radiofónica de la CBS, un hombre se convertiría en leyenda.
Orson Welles explotaba su talento e inteligencia, con una dramatización de la obra de H. G. Wells "La Guerra de los Mundos".
En 1938  millones de americanos escucharon por radio el ataque e invasión de naves extraterrestres.
Y no era cosa fácil.
En aquellos años vivían con la sosobra (como siempre) de una Segunda Guerra Mundial encima, por lo que el sentimiento de vulnerabilidad era extremo.
Tenía Welles 23 años, y varios años de experiencia teatral. Anteriormente fundó el Mercury Theatre, compañía teatral que, según trascendió, montó con gran éxito (y problemas financieros) "Macbeth"... eso no sería sorprendente sino se anotara que gran parte de los actores que intervinieron en esa obra de teatro fueron personas comunes y corrientes, reclutadas mediante un letrero en la puerta del teatro. Como dato anecdótico citan el caso de un vagabundo de color, al cual Orson logró sacarle gran brillo, aprovechando al máximo la maravillosa voz del hombre de la calle.
Con "La Guerra de los Mundos", Welles trazaba la historia de las dramatizaciones en la radio, y también fue punta de lanza en el uso de los medios de comunicación. Según reportes de prensa, al siguiente día de la transmisión de "La Guerra...", millones de personas habían salido de sus hogares, despavoridos, saturando el sistema de transporte, las líneas telefónicas y los reportes a las centrales de policía. Claro, lo que los radioescuchas nunca tomaron en cuenta fue la advertencia, al inicio de la transmisión del programa, de que lo que estaban por escuchar era una recreación. Aún así, miles de personas de Nueva Jersey y de los Estados Unidos en general, habrían hecho sus maletas listas para huír de esa invasión.
Ese 30 de octubre sería como el bautismo de Welles: fue tal su penetración con el público y el desarrollo del guión, trabajado al alimón con Howard Koch quien cuatro años después escribiría "Casablanca", que Welles obtuvo un contrato de la RKO Pictures por dos películas, con total libertad para escribir, producir y dirigir.
Y es que cuentan personas cercanas a Welles (muerto por un paro cardiaco en 1985), la exigencia, perfeccionamiento y pulcritud de sus obras sobrepasaba lo "normal". Además del mal carácter y poco tacto con el que solía tratar a su equipo de trabajo, Welles supo medir a la perfección el pulso de sus colaboradores, obteniendo, un año después, un éxito histórico con la cinta "Ciudadano Kane", del cual fue director y protagonista, y escrita por Herman J. Mankiewicz. Basada en la vida del millonario empresario de medios William Randolph Herst, la cinta no obtuvo las ganancias esperadas, además de que la distribución se vio severamente afectada porque Herst se empeñó en boicotear la cinta. A pesar de ello, la película recibió nueve nominaciones al premio Oscar, consiguiendo Welles y Mankiewicz el galardón al mejor guión original.
"La guerra de los mundos" fue, irónica y prácticamente el único éxito de Welles (sin dejar de tener en la vista a "Ciudadano Kane"). Tuvo en sus manos muchos proyectos cinematográficos, pero siempre resultaban un desfalco económico tanto para el propio Welles como para la casa productora que lo auspiciaba. Pero Welles, siempre buscando romper sus propios límites, buscó en todo momento innovar. Llegar a la gente y conectarse con ella. Tan es así, que según un estudio realizado diez años después por la Univerdiad de Princeton, con la transmisión de "La Guerra de los Mundos" más de un millón de personas se vieron afectadas de alguna forma.
Cito una frase de Orson Welles:

Lo peor es cuando has terminado un capítulo y la máquina de escribir no aplaude.


A Orson los aplausos vinieron después de su muerte.

1 comentario

angie sandino -

Te acabo de reenviar el mail... no me vayas a pegar porque no creo haberte dado la solución al problema...
En cuanto a la guerra de los mundos, sin duda de lo mejor de Wells, aunque te confieso que la película de Cruise no pude ni acabar de verla... me tenía de mal humor...

Un abrazote y feliz semana!