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Lo que no sabes...

Viernes (al fin)

> Uno de los pasajes bíblicos que más de uno adoramos, es el relacionado con el Génesis.
Es decir, la historia novelada de cómo Dios creó al mundo y todo lo que le rodea.
Y en ese mundo, ahora en día, siempre es bien recibido el día vernes.
Y hoy es viernes.
Haciendo una actualización del anterior post, donde comentaba los deslices que muy frecuentemente tiene el gobierno en materia de llevar las leyes y sus respectivas sanciones, titulado "Ya oigo "Pide al tiempo que vuelva"", te cuento que para estos asuntos de gobierno me pinto solo. La famosa respuesta o explicación relacionada a los motivos que me llevaron a soliviantar la autoridad gubernamental y presentar 4 meses después del periodo estipulado por la ley, mi declaración patrimonial salió mejor de lo mejor.
Digamos que di una sopa del propio chocolate del gobierno: El documento citatorio que me entregaron donde enumeraban cualquier cantidad de Leyes, Reglamentos Internos, documentos legales y artículos mafufos consta de cuatro hojas, para que al final pusieran en negritas el meollo del asunto. O sea, uno estaba pegado leyendo citas y citas de las leyes que atañen al asunto, tratando de hilar la historia, para que lo dijeran un tanto más claro unos párrafos antes de que concluyera el masacote de hojas.
Pues yo hice algo parecido: me remití a las mismas leyes y reglamentos que el citatorio mencionaba, enumeré los artículos que de acuerdo a mis funciones justificaban mi tremenda falta administrativa. Así me aventé dos hojas y media, y al final, en  un par de párrafos les di gusto: realmente lo que el famoso "Papá Gobierno" quería era que yo reconociera que era un güey por faltar a su autoridad. Así que me aventé uno de esos super rollos políticos que uno aprende cuando anda en el teatrito: expresé mis disculpas por tremenda falta; les dije que estoy conciente que como servidor público debir realizar mis funciones apegándome en todo momento a las leyes y reglamentos que regían mis labores; que me debí conducir con honestidad, transparencia, respeto al estado de derecho... y que por todo ello, les dejaba entrever, no merecía dormir tan tranquilo habiendo dejado tan indeleble huella en mi vida. No merecía la horca, pero sí al menos unos pellizcos.
O sea, me tiré al drama literario.
Y, ¿sabes qué me dijeron? Bueno, les encantó. Quedaron muy contentos y satisfechos con mi respuesta. Y es que la verdad si apantalla el documento. Sobre todo porque nunca se imaginaron que yo me fuera a remitir a la ley.
Porque claro, la respondí en el mismo tono y forma ("como debe de ser", diría mi Santa Casta y Pura Madre). Yo pensé que el asunto me llevaría mucho tiempo. La verdad el tema se resolvió en unos 30 minutos. Y después de ahí a gozar de la libertad.
Pero regresemos al asunto de que ya es viernes...
¿Qué tal que hoy nos vamos de festival?
Y no es un festival con música y baile.
Es un festival, o una celebración más tradicional.
Este festival celebrado en japón lo hacen de una forma muy particular (como todo lo que aquellas tierras): se avientan (algunos en pelotas) a un lago de lodo. Así como lo lees. El motivo es por el festival "Hadaka Matsuri", que literalmente es "festival desnudo", y se realiza para adorar a los dioses de los sembradíos del arroz.
Así que prepárate porque hoy toca chapuzón en el lodo.
Checa en este vídeo lo bien que la pasan éstos taka-takas.
Buen fin de semana y...

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